Todos los ingredientes al vaso del Thermomix y trituramos en velocidad máxima hasta alcanzar la textura deseada.
Si no disponéis de Thermomix, podéis hacerlo en un robot de cocina o turmix.
Queda espesito y con un sabor muy rico, pero si a alguien le molestan los "topezoncitos" de la okara, puede colarlo a través de una estañeta. En este caso tendríamos un zumo mucho más líquido pero igual de delicioso.