Pelamos los langostinos y reservamos. En una cazuela con mantequilla doramos el marisco, lo retiramos y vamos poniendo en un plato. Agregamos la nata a la cazuela. Cuando haya reducido un poco, echamos el caldo de pescado y los grelos dejando cocer todo junto unos minutos. Añadimos las almejas y cuando hayan abierto, vamos echando el resto de los mariscos. Servimos los grelos decorados con el marisco y cubiertos con la salsa. A nosotros nos gustan tanto que casi nos comemos los 200 g entre dos personas.