Barritas de arándanos, coco y chocolate {receta vegana, paleo y sin azúcar refinada}
Barritas de arándanos, coco y chocolate {receta vegana, paleo y sin azúcar refinada}
Estas barritas de arándanos son veganas, y sin azúcar refinado. La receta original llevaba una base de harina de almendras (lo que la hacía apta para la dieta paleo) pero yo la sustituí por copos de avena, algo menos calórica.
En un bol mezclar los copos de avena y la miel. Puede que tengas que añadir como 3 cucharadas más de agua si te queda algo seca la pasta.
Pon esta mezcla sobre un molde forrado con papel de horno. Yo usé un molde cuadrado de 18 cm. Presionar bien la base utilizando una cuchara o lo que tengas.
Meter al horno durante 15 minutos. Saca del horno y deja enfriar al menos otros 15 minutos.
Mientras se enfría, ir preparando la capa de arándanos: en el robot de cocina o en el vaso batidor se trituran los dos plátanos y 1/2 taza de arándanos. En internet todo el mundo parece que tiene en su cocina una Vitamix que lo tritura todo y con una potencia alucinante. Yo me tengo que conformar con mi triste trituradora que hace lo que puede:
Volcar este puré sobre la base crujiente ya enfriada:
Repartir por encima las chips de chocolate, los arándanos y el coco seco rallado. Yo puse la cantidad original de coco, 3/4 tazas, y encontré que era demasiada cantidad, por lo que he reducido a 2/4 tazas.
Presionar suavemente hacia abajo para que el puré de plátano suba y cubra todo. Yo no lo hice muy bien y el coco no se cubrió con el puré.
Meter al horno a 175º durante 40 minutos. Colocar el molde en las rejillas más cercanas a la base del horno, la segunda rejilla contando desde abajo. De este modo evitas que se tueste demasiado. Yo puse mi molde en el centro del horno y se me tostó mucho el coco. No es algo que me importe demasiado tampoco, porque igualmente estaba rico.
Sacar del horno y dejar enfriar toda la noche. A la mañana siguiente estará firme para poder cortarlo bien en barritas. Se mantendrá toda la semana en la nevera.
Yo dejo madurar los plátanos hasta que la piel está negra y luego los congelo para usarlos cuando los necesito. Sin embargo para esta receta es mejor usar plátanos y arándanos frescos ya que los congelados aportan una cantidad de agua que hace que la crema no se quede tan firme al final.