La receta de hoy realmente os va a sorprender, ya os dije que había estado experimentando con la calabaza y la verdad es que no esperaba conseguir unas galletas tan ricas como éstas.Son como pequeños bizcochitos, crujientes por fuera y blanditos por dentro y además son muy fáciles de hacer.
Lo primero que haremos será cocer la calabaza en el microondas hasta que esté blandita y al sacarla con un tenedor la convertimos en puré.Reservamos hasta que se enfríe.
Por otro lado mezclamos la mantequilla( que habremos sacado un rato antes de la nevera) con el azúcar y le añadimos el puré de calabaza ya frío.
Incorporamos a esta mezcla la harina tamizada con la levadura y la sal.Agregamos por último la ralladura de naranja.Hacemos una bola con la masa y la envolvemos en papel film, dejamos que repose en la nevera como una hora más o menos.
Pasado el tiempo de reposo, vamos formando pequeñas bolitas de masa que rebozaremos con azúcar glass, no dejéis que se caliente mucho la masa al modelarlas porque cogerán peor el azúcar y el craquelado quedará más feo.
Introducimos en el horno precalentado a 180º unos 15 minutos o hasta que veamos que empiezan a dorarse.Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Salen bastantes galletas( unas 40) asi que preparaos para repartir aunque os aseguro que no durarán mucho...