Todos recordaremos el agradable sabor de estas barritas! suave sabor a caramelo con una fina capa de chocolate. Os dejamos un receta explicada paso a paso para que puedas reproducirlas fácilmente en casa! Un postre que irá a la perfección con nuestro cafecito de después de comer!
Precalentar el horno a 180 º. Mezclar el azúcar con la sal, añadir la mantequilla y trabajar la mezcla hasta que tenga la consistencia de un pan rallado grueso. Mezclar la vainilla y la nata, y añadir a la mezcla de harina y mantequilla. Mezclar bien y poner en una fuente o bandeja rectangular que pueda hornearse.
Llevar al horno unos 30 minutos, o hasta que comience a tostarse la superficie. Dejar enfriar por completo a temperatura ambiente.
En un cazo de fondo grueso, mezclar el azúcar con el agua a fuego medio, hasta que se disuelva. Añadir la mantequilla, llevar a ebullición y cocinar hasta que alcance un color dorado de caramelo. Apartar del fuego y verter la nata, que chisporroteará como si fuera a escaparse del cazo.
Mezclar bien, y poner de nuevo al fuego, dejando que rompa el hervor y bajando entonces el fuego, para cocinarlo a fuego lento unos 25 a 35 minutos, hasta que alcance una consistencia cremosa. Verter sobre la base ya fría y dejar enfriar, si es posible, toda la noche.
Disolver el chocolate en un cazo al baño maría. El agua del cazo exterior no debe llegar a más de la mitad de la altura del cazo pequeño. Mantener a temperatura media, de manera que se disuelva el chocolate, pero sin que llegue a hervir en ningún momento.
Cortar el tirar de grosor similar la preparación y pasarlas una a una por el chocolate fundido. Dejar las barritas sobre un papel de hornear hasta que el chocolate esté sólido. Se pueden guardar varios días envueltas en papel en una caja hermética.