¿Verduras cocidas o crudas? La clave para conservar sus vitaminas al máximo

A menudo surge una duda en la cocina: ¿es mejor comer las verduras crudas para aprovechar al máximo sus vitaminas, o cocinarlas para facilitar su digestión? Hay muchas opiniones al respecto, lo que puede llevar a la confusión.
Pero tranquilos, vamos a hacer una breve pausa de cinco minutos para aclararlo y así cocinar de manera inteligente y sabrosa, sin perder ningún nutriente ;)
Comer verduras crudas: un verdadero estímulo
Incorporar verduras crudas en tu dieta es una excelente forma de maximizar la ingesta de vitaminas sensibles al calor, como la vitamina C y algunas del grupo B. Al morder un rábano fresco o una zanahoria crujiente, no solo despiertas tu paladar, sino que también estimulas tu energía de inmediato. No hace falta ser un experto para notar el beneficio de este tipo de consumo, como señala la Revista Santé.
Sin embargo, no todo es tan sencillo. Algunas verduras crudas, como las espinacas o la col rizada, contienen antinutrientes, como el ácido oxálico, que pueden dificultar la absorción de ciertos minerales, tal como apunta ConsoGlobe. Y, aunque no siempre se menciona, hay verduras que resultan más sabrosas y fáciles de digerir cuando se cocinan.
La cocina: no es el enemigo que crees
Un mito común es que cocinar las verduras "mata" las vitaminas. Esto tiene algo de verdad, pero no es inevitable. Si se cocinan adecuadamente, las verduras pueden mantener sus propiedades nutritivas. De hecho, algunos nutrientes, como el licopeno de los tomates, se asimilan mucho mejor cuando se cocina el tomate. Este antioxidante, que es vital para combatir los radicales libres, se absorbe más fácilmente en su forma cocida, según ConsoGlobe. Lo mismo sucede con el betacaroteno de zanahorias y boniatos, que se libera de forma más eficaz al cocinarlos.
La clave está en cómo las cocinas. La cocción al vapor es, sin duda, la mejor forma de conservar la mayoría de las vitaminas y minerales, sin que se pierdan en el agua. Además, mantiene los colores vibrantes y las texturas agradables. Otra opción excelente es saltearlas rápidamente en un wok.
Consejos para aprovechar al máximo tus verduras
Aquí te dejamos algunos trucos sencillos para que puedas aprovechar al máximo los beneficios de tus verduras:
- Opta por métodos de cocción cortos y suaves, como al vapor o salteadas.
- Evita cortar las verduras en trozos demasiado pequeños antes de cocinarlas, para reducir la pérdida de nutrientes.
- Combina verduras crudas y cocidas. Esta es la mejor manera de disfrutar de los beneficios de ambos métodos.
- Consume las verduras lo antes posible después de prepararlas, ya que las vitaminas no aguantan bien el paso del tiempo.
Un pequeño truco: Si cocinas las verduras, usa el agua restante para hacer sopas o caldos. Así se evita el desperdicio y se conservan algunas de las vitaminas hidrosolubles.
En resumen: ¡cocido o crudo, lo importante es variar!
Entonces, ¿deberíamos elegir entre crudas o cocidas? En absoluto. Como en muchos aspectos de la cocina, lo ideal es encontrar un equilibrio. Disfruta de la frescura de una verdura cruda, o cocínala al vapor para potenciar su dulzura. Ambos métodos tienen sus ventajas.
Y más allá de las vitaminas, lo que también importa es el placer de preparar tus verduras de la forma que más te guste. Después de todo, un plato colorido y bien presentado es una dosis perfecta de buen humor para el día.
Fuentes de información:
Revista Santé - ¿Qué método de cocción es mejor para las verduras?
Futura Sciences - Cocción: vapor para conservar las vitaminas
ConsoGlobe - ¿Cómo conservar las vitaminas y minerales de las frutas y hortalizas?
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