Queso fresco

Hay recetas de queso fresco en las que la leche en polvo es fundamental. Puedes sustituirla por la leche en polvo que se vende para niños en la Farmacia. Otra forma de hacer queso fresco sin tener que utilizar leche en polvo es la siguiente: necesitarás 1 litro de leche fresca pasteurizada (que sea pasteurizada es esencial), 45 ml de zumo de limón, una pizca de sal, 2 cucharadas soperas de nata para cocinar. Calienta a fuego muy lento la leche, cuando empiece a hervir, retira y deja reposar 20 minutos. Luego añade el limón, el yogur y la nata y deja reposar 10 minutos. Pon la olla a fuego medio y cuando la parte sólida de la líquida se separe, retira, añade la sa, remueve y ya drena en la nevera.El queso fresco se estropea en pocos días. Guárdalo siempre refrigerado.
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