Usaremos una cazuela donde calentaremos el aceite para que sofreír la cebolla bien picada. Añadimos también las almendras y el hígado de la liebre. Retiramos y en una picadora o un almirez se hace una majada con el sofrito, posteriormente vamos añadiendo los ajos crudos, el clavo y la pimienta. Reservamos la majada para después.
En el mismo aceite de antes, vamos a freír la liebre troceada y zazonada. Cuando veamos que este dorada, la regamos con el vino y el vinagre. Tapamos la cazuela y dejamos que se cueza durante unos 10 minutos.
Añadimos la majada y la sangre de la liebre disuelta en un poco de agua caliente. En el momento que consigamos la mezcla uniforme de la sangre y la majada, se perfuma con el tomillo y el laurel, rectificamos con sal y dejamos a fuego muy lento hasta que esté tierna.
Soy Extremeña, sabía que se hacia asi más o menos, pero he querido recordar la receta, la voy a preparar mañana tal como tu la has hecho.... seguro que esta riquísima... Un Saludo..
Comentarios de los miembros:
Soy Extremeña, sabía que se hacia asi más o menos, pero he querido recordar la receta, la voy a preparar mañana tal como tu la has hecho.... seguro que esta riquísima...
Un Saludo..