En el mundo de la cocina, el alcohol se utiliza para realzar sabores y crear recetas deliciosas. Desde una carne en salsa de cerveza como la carbonnade flamande, unas gambas flambeadas al whisky, hasta un postre con licor, estas técnicas son comunes en la gastronomía. Además, existe una creencia popular profundamente arraigada: "El alcohol se evapora completamente al cocina r". Sin embargo, este mito, aunque ampliamente difundido, no es del todo cierto. Los estudios científicos han demostrado que, incluso tras una larga cocción, siempre queda una cantidad residual de alcohol en la comida.
Esto nos lleva a una pregunta crucial: ¿es seguro incluir alcohol en recetas que serán consumidas por niños? La respuesta es sencilla: no, y aquí te explicamos por qué.