Poner a infusionar las hebras de azafrán en el agua caliente y dejar unos 5 minutos. Mezclar esta infusión con el yogur, el ajo, el zumo de limón, un chorrito de aceite de oliva y un poco de sal. Enfriar en la nevera.
Echar un chorrito de aceite de oliva, sal y pimienta a las rodajas de berenjena y mezclar bien. Asar a 220ºC durante 30 minutos aproximadamente. Dejar enfriar.
Colocar las berenjenas en una fuente, añadir el yogur de azafrán, los piñones, las semillas de granada y la albahaca.
Comentarios de los miembros:
Se ve deliciosa, creo que no es necesaria la calabaza¡¡¡