Tuesta el ajonjolí en un caldero o sartén profundo, Mueve las semillas constantemente con una cuchara de madera hasta que comiencen a dorarse, no muy oscuras porque te dará un gusto amargo al tomar el jugo.
Retíralas y déjalas enfriar
Échalas en la licuadora con el agua o si prefieres puedes usar leche fresca o descremada y muélelas, hasta que se vea blanca como la leche.
Después pasa el liquido por un colador de tela o metal, endúlzalo y se sirve con unos cubitos de hielo o también puedes triturar el hielo en la licuadora y hacerlo como frappe.
Comentarios de los miembros:
Muy bueno todo
Muy buena
Yo la preparo pero con un poco mas de azúcar y queda deliciosa.
Por fin consegui la receta que tanto buscaba. Muy amena. Gracias, M. Eche :)