Lavamos las berenjenas y, sin pelarlas, las cortamos por la mitad a lo largo. Hacemos unos cortes a lo largo en cada mitad, las salamos, añadimos un chorro de aceite y las metemos en el horno precalentado a 180º-200º.
Mientras se van haciendo las berenjenas, aprovechamos para picar la cebolla y los pimientos.
Cuando estén blandas (necesitarán unos tres cuartos de hora) sacamos las berenjenas y con ayuda de una cucharilla (y una pequeña dosis de cariño y paciencia a partes iguales) las vaciamos. Si “la carne” tiene muchas semillas procuramos retirarlas.
Salteamos la cebolla y los pimientos y cuando estén casi hechos añadimos las gambas. Cuando estas cojan color añadimos “la carne” de las berenjenas.
Damos un par de vueltas a esta mezcla y añadimos el atún claro. Seguimos dándole vueltas un par de minutos más y retiramos del fuego.
Llenamos las berenjenas con esta mezcla, espolvoreamos un poco de queso rallado y las metemos al horno otros 5-10 minutos.