Italia, verdadera cuna de la gastronomía, es famosa por sus particulares ingredientes de calidad que deleitan el paladar: su vinagre balsámico, su Prosciutto di Parma, su pesto, aceitunas, trufas, limoncellos, sus deliciosos quesos... Entre ellos, el Parmigiano Reggiano y el Grana Padano que ocupan un lugar de honor. Estos dos quesos, emblemas de la tradición quesera italiana, parecen similares a primera vista, pero esconden sutiles diferencias que los hacen únicos.