Funda la margarina y añada el anís, la ralladura de limón, el azúcar y la leche o agua y el tofu. Mezcle bien en la batidora.
Incorpore la levadura mientras el líquido está aún calentito y deshágala con las manos.
Como si de un pan se tratase mezcle con las harinas y amase, por lo menos un cuarto de hora. Eso es bueno, eso es bueno.
Deje reposar la masa en un recipiente cubierto, habiendo pulverizado antes agua en la superficie para que no forme costra.
Cuando la masa haya doblado su volumen, divídala en porciones iguales. En nuestro caso, han salido 6 monas. Formelas como guste y deje reposar sobre papeles individuales de horno.
Le resultará así más fácil para luego manejarlas y servirlas. Nosotros hemos hecho formas conejiles y de huevos, porque somos muy paganos.
No olvide pulverizar la superficie con agua. De caso contrario se seca la superficie y esto impide que esponje correctamente.
Pasada una hora aprox. habrán doblado su volumen de nuevo, de manera que horneelas a unos 150º-160º.
Si después quiere colocar el huevo en la mona y es perspicaz, meterá un huevo de costura en la masa en el lugar destinado y de esta manera cuando la saque, todo le encajará perfectamente.
Podrá comprobar que la superficie se torna de un marrón oscuro. Aaah! Por eso que se llama panquemao fíjese.
Para la decoración, haga un sirope a ración de 3 partes de azúcar por 1 de agua y una pizca de anís.
Pinte las monas y espolvoree fideos de colores. También puede pintar la mona entera con chocolate fundido o simplemente, espolvorear azúcar
Deje secar el glaseado y a merendar y a volar el cachirulo en la playa o en el monte con la sombrilla siempre.