Desleir la levadura fresca en el agua tibia y esperar unos 10-15 minutos para que haga su efecto.
Tamizar la harina y la sal dentro de un bol grande, añadir el agua tibia con la levadura y mezclar con una cuchara de madera (no de l). Incorporar la matalauva y seguir mezclando. Cuando la masa esté bastante elástica y sea homogénea, seguir amasando en la mesa de trabajo, ayudándonos de un poco de harina espolvoreada para que no se pegue a dicha superficie.Unos 15 minutos hay que amasar, doblando la masa hacia dentro y estirándola una y otra vez. Hacer una bola y ponerla en una fuente limpia enharinada, dejando que leve en un sitio oscuro y tibio durante 1 hora y 30 minutos (primera levada).
Volver a amasar unos 5 minutos más y meter la bola de masa en una fuente limpia y enharinada y ésta en el horno a menos de 50ºC durante unos 30 minutos (segunda levada).
Dar forma al pan, colocarlo en una bandeja espolvoreada con harina y hacerle unos cortes largos con un cuchillo bien afilado, para que se forme más costra. Rociarlo con agua con un vaporizador y espolvorearle un poco de harina por encima.
Dar forma al pan, colocarlo en una bandeja espolvoreada con harina y hacerle unos cortes largos con un cuchillo bien afilado, para que se forme más costra. Rociarlo con agua con un vaporizador y espolvorearle un poco de harina por encima.
Meterlo en el horno, precalentado a 220ºC, con un bol con agua que mantenga la humedad, que es la que favorece la costra del pan. Tenerlo a esa temperatura durante 15 minutos y otros 15 minutos a unos 180ºC. Por si acaso, decirles que yo le puse el ventilador y lo vaporicé con agua 2 veces. A los 30 minutos lo saqué y salió esta preciosidad de pan.Cuando saquemos el pan del horno, golpear suavemente con él una superficie dura.