Para empezar colocamos los huevos en un bol junto con el azúcar y el azúcar vainillado, y los batimos bien. Añadimos las natillas y cuando esté bien integradas, añadimos el aceite y seguimos batiendo sin parar, para que el bizcocho salga esponjoso.
Tamizamos la levadura junto con la harina y lo incorporaremos a la mezcla anterior, poco a poco. Cuando la mezcla esté toda bien integrada, añadimos el chocolate hecho trocitos ( podemos poner pepitas de chocolate). A mi en este caso se me olvido comprarlas y le puse el chocolate troceado. (las pepitas se quedan más esparcidas por todo el bizcocho al pesar menos), pero de las dos formas queda riquísimo.
Vertemos la masa en el molde y lo metemos al horno. He puesto el bizcocho al horno precalentado a 190ºc durante diez minutos para sellar todos los bordes con este golpe de calor. Luego, le he bajado la temperatura a 180ºc, que es la temperatura óptima en mi horno para que me suban bien, y lo he horneado durante 35 minutos. (quería que se me quedara por todo los lados igual) Comprobarlo con un palito para ver que está bien hecho.
Lo dejamos enfriar un poco dentro del horno. Luego lo sacamos y lo ponemos encima de una rejilla para que se termine de enfriar por igual.
Yo lo he espolvoreado con azúcar glas y luego y le he puesto el chocolate rallado ( yo he rallado el chocolate con un pela patatas). Podéis ponerle lo que más o guste!!!