Primero que nada, debes de Triturar 225 g de chocolate, ponerlos en un recipiente y mantenerlo aparte. Verter 2 dl de nata y leche en una olla de capacidad media y llevar casi a ebullición.
Agregar el chocolate y mezclar hasta que se disuelva. Trabajar las yemas de huevo, la maicena y el azúcar un una terrina hasta que el compuesto este cremoso y denso.
Verter lentamente, revolviendo, el compuesto de chocolate sobre las yemas. Volver a poner la crema en la cazuela a fuego bajo, mezclando continuamente, hasta que espese. Retirar la cacerola del fuego.
Disolver la gelatina en un cacito con tres cucharadas de Agua hirviendo. Incorporar a la crema de chocolate y dejar enfriar. Engrasar con aceite de semillas ocho moldes de pudín de tamaño medio y verter la mezcla de chocolate, llenando los tres cuartos de su capacidad.
Ponerlos sobre una fuente, cubrir, y tener al menos dos horas en la nevera. Con la punta de los dedos, extraer el manjar blanco de los moldes. Disponer sobre un plato, decorar con 2 dl de nata montada y el chocolate restante cortado en escamas y servir.