Esta es una receta de torrijas tradicionales de Semana Santa, en casi todas las casas no suelen faltar. Podemos prepararlas de muchas maneras con miel, con vino, con cremas e incluso con chocolate... Las más tradicionales son las que hoy os preparo, las de leche con azúcar y canela.
Aunque muchas ya conocéis esta receta, para quien no la ha hecho nunca, esta receta es fácil de hacer y quedan muy buenas.
Cortaremos el pan en rodajas de unos 2 cm. de grosor. En un cazo pondremos la leche a calentar con las dos ramas de canela y 5 cucharadas de azúcar. Cuando empiece a hervir retiraremos y lo echaremos en una fuente y lo dejaremos templar.
Cuando este listo, pondremos el pan, lo dejaremos en la leche unos minutos hasta que las rebanadas queden empapadas. No dejarlas mucho, porque si no se deshacen y no se pueden manipular.
Pondremos una sartén con bastante aceite a calentar. Cuando esté caliente iremos cogiendo las rodajas de pan que tenemos en leche y las pasaremos por el huevo y las freiremos.
Cuando estén doradas, las pasaremos por un plato que tendremos preparado con papel de cocina. En otro plato tendremos preparado el azúcar con la canela y las rebozamos.
Y así hasta que estén todas, que iremos poniendo en una fuente.Como veis son muy facilitas y quedan muy buenas.
Hace tiempo vi en una web de cocina, lamento no recordar cual, un buen truco para que a la hora de freir las torrijas no se rompan: congelarlas previamente... ¡y funciona, sobre todo para los que somos más torpes con la pala!
Riquísimas seguro! Buena idea, gracias por compartirla :)