Ya lo sabemos: el consumo excesivo de sal es un enemigo silencioso para nuestra salud. Un condimento esencial, pero que es responsable de más de 1,8 millones de muertes al año en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Su consumo excesivo en las dietas modernas está directamente relacionado con enfermedades graves como hipertensión arterial, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia cardíaca y daño renal.
A pesar de las recomendaciones, el abuso de sal sigue siendo un problema de salud pública. La mayoría de las personas consume más del doble del sodio recomendado diariamente, muchas veces sin saberlo. Esta sobreexposición proviene, en su mayoría, del consumo de alimentos procesados y ultraprocesados que enmascaran cantidades alarmantes de sodio. La sal oculta es por tanto un enemigo silencioso. ¡Vamos a desenmascararla juntos! y veamos también cómo encontrar un equilibrio entre necesidad y riesgo y, sobre todo, ¿qué alternativas tenemos para disfrutar de su sabor sin poner nuestra salud en peligro?