El aguacate es originario de México, de donde se extendió al sur del continente americano. Es el fruto de un árbol, del que existen muchas variedades, pero el mejor es el que se conoce como aguacate Hass, con la cáscara casi negra y rugosa.
Posee un alto valor nutritivo y es muy común que en la mesa de toda familia mexicana, se consuma a diario.
Se pueden rellenar casi de cualquier cosa, pero el maridaje del atún algo salado con lo dulzón del aguacate, combina muy bien.
Vaciamos los aguacate (ver Cómo pelar un aguacate) con cuidado para que no se rompan las cáscaras.
Picamos la pulpa del aguacate en trocitos pequeños, le añadimos el zumo de limón. Reservamos.
Escurrimos el atún; en caso se estar en aceite de oliva, vaciamos el aceite en un frasco para usarlo en alguna otra preparación y no desperdiciarlo.
Mezclamos atún, aguacate, cebolla, lechuga y un poco de sal, revolvemos y le añadimos mayonesa suficiente para formar una pasta. Rectificamos sal y rellenamos las cáscaras ayudándonos con una cuchara.
Decoramos al gusto, con una tira de pimiento, una aceituna, una rodaja de pepinillo en vinagre, etc.
Sugerencias: Se sirven fríos, es recomendable hacerlos con tiempo para que estén en la nevera de menos media hora.
Para saber si un aguacate está maduro, debe ceder a una ligera presión en los dedos. Un aguacate no madura si lo tienes dentro de la nevera.
Comentarios de los miembros (38):
Rapidísima, facilísima y buenísima. GRacias
L he cocinado. Esta riquísima, a falta de atún puedes utilizar salmón ahumada y aceitunas sin hueso a rodajas.
Que bueno¡¡
Fácil y rápido, muy refrescante
Tres bom
Me gusta
MUY RICA Y SANA
Me gusto
Me parece un plato estupendo y fácil de hacer; además de rico,para una cena informal.
Me gusta