Hoy te traemos unos suaves y esponjosos donuts al horno, ¡sin freír!, para un sabroso y saludable tentempié. La textura de estas donas es ligeramente diferente a la de las rosquillas clásicas, pero el sabor sigue siendo igual de delicioso. Y para hacerlos aún más irresistibles, agregamos chocolate fundido por encima ¡Definitivamente tienes que probarlos!
Hidratar la levadura con la leche tibia. Dejar reposar la mezcla durante 10 minutos a temperatura ambiente.
Verter la harina en el bol del robot de cocina. Añadir el azúcar y la sal por un lado y cubrir con harina, formando un pequeño pozo.
A continuación, añadir en el centro el huevo, la mezcla de leche y levadura y el aroma de vainilla. Amasar durante 5 minutos a velocidad 2.
*Si no tienes batidora eléctrica, utiliza la mano*
Añadir poco a poco la mantequilla blanda. Cuando esté bien incorporada, amasar otros 5 minutos.
La masa debe quedar lisa y flexible. Formar una bola y cubrirla con un paño limpio Déjala reposar a temperatura ambiente durante 2 horas (mejor si la dejas reposar en un lugar cálido)
Pasado este tiempo, amasar ligeramente durante unos segundos y formar bolas de unos 60 gramos.
Colocar las bolas de masa en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado, separándolas bien. Hacer un agujero en el centro para formar los donuts. Cubrir con un paño de cocina y dejar reposar nuevamente 1h/1h30 a temperatura ambiente.
Hornear los donuts durante 10 minutos en un horno precalentado a 180°C.
Cubrir los donuts con chocolate fundido. Decorar con los toppings de tu elección y ¡listo!
El glaseado: Si quieres optar por un glaseado diferente, puedes sustituir el chocolate negro por Nutella o azúcar glas. Puedes encontrar la receta del glaseado tradicional para donuts aquí.
Freídora de aire: También puedes utilizar una freidora de aire o airfryer en lugar de horno, recuerda pincelarlos ligeramente con aceite y cocinarlos durante unos 7 min a 160°C. Comprueba el punto de cocción si es necesario.
Conservación: Puedes conservar los donuts horneados hasta 2 días en una lata hermética o en el congelador.