Ésta es una de las recetas más sencillas, ricas y sanas que hago, es tan fácil que cada persona la hace a su manera, por lo que podemos decir que esta receta es originalmente mía :). Lo ideal sería acompañarla de pasta, arroz, pan, etc... Más adelante, en otra receta, os pondré con qué las acompañé yo.
Mientras vamos a preparar el plato precalentamos el horno a 150º. Partimos la berenjena y la vacíamos dejando casi únicamente la cáscara. La carne de la berenjena la cortamos en trocitos pequeños y calentamos el aceite en una sartén.
Rehogamos los trozos de berenjena y la carne picada hasta que la carne esté hecha. Añadimos el tomate triturados y, mientras removemos, agregamos la sal, el orégano y el perejil. Al echar tan poco tomate, no tenemos que esperar para que espese y se solidifique, lo importante es que todo se impregne del tomate.
Cuando lleve hirviendo 1 minuto, sin parar de remover, apagamos el fuego y añadimos el azúcar, así eliminamos la acidez del tomate. Removemos bien y lo usaremos para rellenar la berenjena con una cuchara. Si queréis, podéis añadirle un poco de queso rallado para decorar, pero poco.
Metemos la berenjena al horno aumentando los grados a 200º y esperamos 20 minutos. ¡Y listo, a comer!
Como véis, es muy sencilla y sana. ¡Qué disfrutéis!