Riquísimo un plato de pasta, sobre todo cuando la guarnición es un huevo frito y masa de chorizo preparada por tu madre.
Un plato ideal, lleno de sabores, color, con hidratos y proteínas.
Además bastante económico.
En una sartén ponemos un pelín de aceite, cuando esté caliente hacemos la masa de chorizo, a fuego fuerte para que se haga rápido y no pierda la jugosidad de la carne.
Reservamos y ponemos a parte el excedente de jugo que soltara.
En la sartén ponemos más aceite, el justo para freír el huevo, añadimos el jugo sobrante de la masa de chorizo y cuando esté en su punto hacemos el huevo, cuando lo echemos le ponemos un poco de sal pero esto ya al gusto.
Escurrimos y troceamos con unas tijeras.
Ponemos en un bol un poco de aceite para acompañar quien quiera "más sabor" si tiene pasta en su plato.