Calabazas sangrientas de mazapán para festear halloween. Asusta a tus invitados con una fuente plagada de calabazas con muy mal humor y muy mala pinta pero un sabor delicioso. Geniales para los niños. Una receta sencilla y económica. Esta receta es muy sencillita de hacer y quedaréis como unos reyes al presentar vuestro postre a la mesa.
Deshacemos bien los grupos de azúcar y almendra con una cuchara de palo hasta que nos quede una textura como de arena suelta o tierra fina.
Añadimos las claras de huevo bien batidas pero sin montar a punto de nieve.
Añadimos la cucharilla de esencia de vainilla, en caso de que queráis darle un toque a vainilla.
Removemos bien la masa con la cuchara de palo y luego amasamos a mano hasta conseguir una masa fina y homogénea.
Teñimos la mayor parte de la masa de color naranja (amarillo y un poco de rojo, primero siempre se echa el color más claro) y un poco de color verde (amarillo y un poco de azul).
Formamos bolitas del tamaño deseado ahuecando la masa con las palmas de la mano y con la ayuda de un palillo marcamos los ojos y la boca.
Con un palillo, hacemos 5 ó 6 líneas en la calabaza, sin presionar demasiado sobre la zona en donde están los ojos y boca y perforamos ligeramente la parte superior, el agujero resultante nos servirá para ponerle el rabito a la calabaza.
Tomamos un poco de masa verde con los dedos y hacemos un rabo, lo ponemos en la parte superior de la calabaza y lo retorcemos un poco.
Con un pincel fina y tinte rojo, marcamos los ojos y la boca, para dar más profundidad, y si queremos añadimos detalles como: sangre, una lengua, verrugas… Y ya tenemos nuestras calabazas de mazapán.
A morirse de miedo y que se os haga… la boca chocolate
Claro! Siempre es una gran idea hacer nuestros propios dulces. Además de salir más baratos sabemos de primera mano qué ingredientes llevan. Un saludo enorme!
No se utiliza el horno para esta receta. La clara se usa para hidratar la harina y ayudara a empastar los ingredientes. Si no confias en esta receta por respeto a la salmonela, te recomendamos utilizar huevo pasteurizado.
Claro! Siempre es una gran idea hacer nuestros propios dulces. Además de salir más baratos sabemos de primera mano qué ingredientes llevan. Un saludo enorme!