Batimos los huevos con el azúcar. Podéis hacerlo a mano porque no necesitamos montarlos. Añadimos el extracto de vainilla y mezclamos bien.
Ponemos la mantequilla y el chocolate en un tarro y los derretimos al baño maría. Id removiendo para que no se os queme. Lo añadimos a la mezcla de huevos y azúcar.
Añadimos la harina y el cacao y mezclamos bien con una espátula, hasta que no queden grumos.
Rellenamos moldes de flan de usar y tirar, de aluminio (podéis encontrarlos en cualquier súper). No los rellenéis hasta arriba, sólo 3/4 partes.
Los metemos en el congelador hasta que queramos consumirlos. Esto es importante: no hagáis los coulants de antemano, esperad hasta justo antes de tener que servirlos, porque sino van a perder toda su gracia. A ver, si los queréis hacer para consumir “ya”, los tiempos de horneado van a cambiar (claro que también afecta que cada horno es un mundo). En principio, si los habéis congelado, tenéis que hornearlos a 180º (habiendo precalentado el horno) unos 10-12 minutos. Si los consumís sin congelarlos previamente, van a ser unos 8-10 minutos. A ver, don’t panic, hay un truco para saber cuándo sacarlos: cuando veáis que han subido (rebasando el molde) y se empiezan a hundir un poco por el medio soltando el chocolate líquido del interior, ¡¡ENTONCES ES EL MOMENTO!!
Comentarios de los miembros:
SU MISMO NOMBRE LO DICE DESPUES DE DEGUSTAR ESTA DIVINIDAD LO UNICO QUE QUEDA ES MORIRSE POR QUE JAMAS VOLVERAS A PROBAR ALGO MEJOR QUE ESTO
Que rico
Terriblemente esquisito