Esta es la versión en tarta de queso del clásico bizcocho de piña invertido.
La combinación de queso, piña y caramelo es deliciosa y, además, extremadamente fácil de hacer.
Engrasar un molde de cristal de Pyrex de 26 cm. de diámetro. Echar un buen chorreón de caramelo líquido en el fondo. Distribuir las rodajas de piña por el fondo (se necesitan 7 rodajas). Poner media guinda en el agujero de cada rodaja.
Echar el azúcar en la Thermomix y glasear. Añadir el queso de untar, el requesón, los huevos, el coco rallado, una rodaja de piña, 100 ml. del jugo de la lata de la piña y la harina. Mezclar 3 minutos en velocidad 4 y luego triturar todo unos segundos en velocidad 6 1/2.
Si no tienes Thermomix, todo esto lo puedes hacer con tu batidora normal o con una minipimer.
Volcar todo este batido, despacio, en el molde caramelizado y procurar que las guindas no floten.
La tarta subirá un poco, así que no podemos llenar el molde hasta los bordes. Poner un trozo de papel albal sobre la rejilla del horno, por si se nos desborda un poquito no nos manche la solera del horno. Introducir la tarta en el horno durante 30 minutos.
Dejar enfriar durante 5 minutos y darle la vuelta volcando la tarta sobre un plato de servicio.