Pelamos (como es evidente) los plátanos y los cortamos en trozos de entre 2 y 3 centímetros. En un bol grande ponemos el agua helada, la yema del huevo y las dos cucharadas de miel y batimos todo muy bien.
Añadimos la harina de fuerza poco a poco hasta que quede todo muy bien ligado. Ponemos a calentar el aceite a fuego bajo y echamos el plátano en el bol con la tempura.
Cuando el aceite haya alcanzado la temperatura echamos los pedazos de plátano escurriendo el sobrante de la masa. Retirar cuando estén dorados y poner en una fuente con papel absorbente.
Podemos aprovechar la clara del huevo sobrante para hacer un merengue añadiendo tres cucharadas de azúcar y batiendo con el batidor de varillas hasta que quede blanco y consistente, y lo servimos como acompañamiento.
Muy bueno. Lo recomiendo. Es muy fácil de hacer, aunque no seas muy diestro. Además, queda muy bien si tienes visitas inesperadas, pues a penas tardas unos 15 minutos en hacerlos.
Comentarios de los miembros:
Muy bueno. Lo recomiendo. Es muy fácil de hacer, aunque no seas muy diestro. Además, queda muy bien si tienes visitas inesperadas, pues a penas tardas unos 15 minutos en hacerlos.