Picamos bien la cebolla, un diente de ajo y rallamos o picamos bien los tomates. En la olla que vayamos a utilizar calentamos el aceite y ponemos todo a pochar.
Cuando esté todo pochadito, añadimos el vino y dejamos reducir.
Después añadimos las patatas peladas y cascadas, damos unas vueltecitas y echamos la cucharadita de pimentón.
Seguidamente, para que el pimentón no se queme, vertemos el caldo de pescado hasta que se cubran las patatas, no mucho más para que no quede demasiado caldoso.
En un mortero, machamos dos dientes de ajo con un poco de perejil. Cuando el guiso empiece a hervir lo añadimos.
Dejamos cocer unos 15 minutos, más o menos, dependiendo de las patatas. El congrio se debe echar al guiso cuando calculemos que quedan 8-10 minutos para que se terminen de hacer las patatas.
Cuando esté lo servimos calentito, acompañado de un buen trozo de pan.
Sentimos que no te haya satisfecho el resultado de esta receta.