Kerala es un estado federal del suroeste de la India, de donde viene este curry.
Me encanta hacer recetas estupendas aprovechando restos que tengo en el congelador. Y con sólo 250 gr. de carne picada y resto de leche de coco, he hecho un curry estupendo.
Esta receta la voy a organizar por bols con sus propios ingredientes.
Combina todos los ingredientes del bol 1 en el robot de cocina y mezcla todo bien. Esto ayuda a que la masa de la albóndiga amalgame bien y no se rompa. Se cubren con film de cocina y se meten en la nevera durante 30 minutos. Esto también ayuda a que se reafirme la masa.
Se forman albóndigas pequeñas, a mi me salieron 13. Se frien o se hacen en el horno a 175º durante 20 minutos.
Calentar aceite en una sartén y freir los ingredientes del bol 2 y freir durante 1 minuto.
Añadir la cebolla troceada y pochar hasta que esté tostada. Añade la pasta de jengibre-ajo y mezcla bien. Añadir el tomate y freir hasta que el tomate pierda su agua.
Hacer una pasta con los ingredientes del bol 3 con un poco de agua hasta que se forme una pasta y añade a la sartén y fríe durante 1-2 minutos.
Mezcla la 1/2 taza de agua caliente con la taza de leche de coco y añádela a la sartén. Espolvorea con garam masala. Mezclar bien.
Llevar la salsa a ebullición y añadir las albóndigas, bajar el fuego al mínimo, tapar y dejar cocer hasta que la salsa espese. En el blog de Vazhayla lo dejaban 30-45 minutos. Yo lo dejé 30 y creo que me pasé. La salsa espesó demasiado.
Si quieres espolvorea con cilantro fresco picado. Yo no tenía.