Ponemos la nata y el azúcar glas en un cazo al fuego. Cuando empiece a hervir, retiramos. Y añadimos la almendra y las nueces picadas y removemos mezclando bien.
Forramos con papel de horno, un molde rectangular, de modo que sobresalga el papel por los bordes. Se puede usar un tuper tamaño barra de turrón o una cajita de madera. Y vertemos la pasta dentro, damos unos golpecitos sobre la encimera para que sea asiente bien y aplastamos un poco con una cuchara.
Tapamos con el papel sobrante y aplastamos un poquito con las manos, allanando un poco la base. Y dejamos sobre la encimera en sitio fresco unas 24 horas como mínimo antes de consumir.
Sale un turrón nada empalagoso y muy rico. Como lo casero no hay nada igual...
Comentarios de los miembros (41):
No me ha quedado sólido muy rico pero una pasta como melcocha
Sale una pastilla grande y con un sabor y textura muy suave...delicius..
Un turron maravilloso, lo mejor del mundo!!!! Felicitaciones por esta receta.
Beatriz
Fácil, delicioso y nutritivo
Buenisimooooo
ME ENCANTAN LOS TURRONES Y COMO PUDE LEER ESTE SE VE PROMETEDOR, GRACIAS POR EL DATO
Gracias
Muy,bueno
Muy buena
Asi deberian de ser todas las recetas ricas y faciles gracias