Las fiestas navideñas son, sin lugar a dudas, una época de alegría, reencuentros y tradiciones que nos invitan a compartir momentos especiales con seres queridos. Sin embargo, con la emoción de las celebraciones, también llega una realidad innegable: el gasto. Los costos asociados a las comidas, los regalos y los preparativos pueden rápidamente dispararse si no somos cuidadosos. Pero no todo está perdido. Si planificamos con astucia y adoptamos ciertos hábitos de compra, podemos disfrutar de una Navidad sin sobresaltos financieros.
Aquí te dejamos algunos consejos prácticos para evitar caer en las trampas comerciales y ahorrar durante esta temporada: