A las xoubas hemos de quitarles las cabezas y la tripa y lavarlas bien. Luego, las dejamos escurrir.En el fondo de una cazuela de barro, ponemos un cuarto de la cebolla en juliana. Cortamos las patatas en ruedas y colocamos sobre la cebolla.
Sobre las ruedas de patata ponemos otro cuarto de la cebolla y medio tomate picado.
Lo más divertido y curioso de esta receta viene ahora; tomamos una xouba con la mano derecha y la doblamos a la mitad. Con la mano izda. apretamos en la zona doblada hasta que se parta la espina del pescado.
Vamos colocando las xoubiñas todo alrededor de la cazuela y sobre las patatas.Resulta muy curiosa esta forma de doblar el pescado, sin embargo, según me explicó mi suegra, con este gesto, conseguimos que la salsa penetre mejor en el interior de la xouba y ésta a su vez, desprenda su sabor e impregne la salsa.
Seguimos llenando la cazuela con las xoubiñas y finalmente, ponemos el resto de la cebolla y el tomate por encima así como las hojas de laurel.Llenamos un tazón ( 200 ml. aprox.) de aceite de oliva, le ponemos el orégano, la sal y el pimentón dulce y bañamos la preparación con esta mezcla.
Ponemos la cazuela al fuego y cuando empiece a hervir, le ponemos el vino blanco. Como siempre os recomendaría un alvariño, pero cualquier blanco joven servirá.
Dejamos cocer agitando la cazuela de vez en cuando, hasta que las patatas estén blanditas pero todavía enteras.
Comentarios de los miembros:
Para comer les parroches de otra manera
Gracias, no me acordaba como las hacía mi abuela, perfecto