Vasitos de crema y fresas

Preparación

• Empezamos cortando los círculos del bizcocho del tamaño del vaso. Si queréis hacerlo exacto, os recomiendo poner el vaso sobre el bizcocho, y cortar por el borde con un cuchillo bien afilado. Necesitaremos dos discos por cada vasito. Ponemos el primero en el fondo del vaso y por encima unas cucharadas de crema pastelera.
• Sobre la crema, ponemos unas fresas picadas bien pequeñitas y que habremos puesto a macerar con azúcar, para que suelten todo su jugo. Sobre las fresas, un par de cucharadas de mermelada de fresa. Ponemos entonces el otro disco de bizcocho. Yo los puse sin empapar en almíbar ni nada, porque tanto la crema como las fresas son bastante húmedas, si lo hacemos con unas horas de antelación queda perfecto. Si vamos a consumirlo al momento, os recomiendo mojarlo un poquito.
• Lo metemos en la nevera, y procedemos a hacer las decoraciones. Para hacer estas cúpulas necesitaremos 3 cosas básicas: chocolate fondant, unos globos de esos pequeñitos de rellenar con agua y un biberón o un cucurucho de papel para el chocolate. Ponemos 2/3 del chocolate a fundir al baño maría. Cuando esté derretido, retiramos del fuego, y sacamos el recipiente donde está el chocolate del agua.
• Inflamos los globos hasta que encajen de tamaño en los vasitos que vayamos a utilizar, para que quede lo más ajustado posible. Ponemos el chocolate en un biberón de cocina o si no tenemos en un cucurucho que podemos hacer con medio folio mismamente, y empezamos a hacer líneas de chocolate sobre el globo. Hacemos que estas líneas se crucen en varios puntos, cuantos más mejor, para que sea más resistente. También os recomiendo no dejar "agujeros" demasiado grandes, para que no se rompa fácilmente. Podemos hacer cada cúpula distinta. Ponemos a secar el chocolate poniendo el globo sobre un vaso estrecho, con cuidado de que unos no se toquen con otros, para que no se queden pegados.
• Si la temperatura es media, sin demasiado calor, podemos conservarlos fuera de la nevera hasta el momento de usarlos, para que estén bien brillantes. Cuando el chocolate se haya solidificado, podemos proceder a pinchar los globos. Lo mejor es usar un alfiler o un cutter, y hacerlo sin dudar, aunque da un poco de miedo, la cúpula no debería romperse. Los globos se quedarán pegados a la cúpula en un punto, pero tirando con un poco de cuidado salen perfectamente, sin romperla. Si hace calor las conservaremos en la nevera, para que no se derritan. Podemos ponerlas ya sobre los vasitos o justo en el momento de servirlas, como prefiramos.