Yo me he acostumbrado a saltear las patatas en sartén en vez de hacerlas en el horno porque para una ración no compensa el gasto de horno y la factura de luz. Una vez que te acostumbras a cocinar las patatas de este modo te puedes olvidar de las patatas fritas con todo ese aceitazo y olor a fritanga o de encender el horno para hacerte una solitaria patata para acompañar un filete o pescado.
He seguido la misma técnica de mi entrada "Patatas salteadas con especias", aunque he utilizado un mix de especias diferente. En este punto puedes usar lo que tengas en casa, todo le va bien.
Parece ser que en Australia este tipo de patatas siempre siempre van acompañadas con nata agria y salsa dulce de chile, es más, tienes que especificar que no quieres esta salsa porque por defecto se la ponen a las patatas, para ellos es imprescindible. Es un dip que me ha encantado. Además me viene perfecto para darle salida a un resto de nata agria que tenía en el congelador. La salsa dulce de chile la puedes encontrar en tiendas asiáticas.
Yo sólo tengo patatas medianas tirando a pequeñas. Normalmente las lavo bien y las salteo con su piel. Hoy he tirado de piloto automático y las he pelado. En realidad no pensaba publicar ninguna receta pero al terminar de cocinar he probado una patata con el dip y como me ha gustado tanto, he terminado improvisando esta foto, sin pensar mucho en cuestiones estéticas ni entretenerme mucho.
Se cortan las patatas por la mitad y cada mitad a su vez en dos mitades o en tres si fueran más grandes. Se pone agua a hervir, con sal. Una vez que rompa a hervir se vuelcan las patatas y se dejan hervir 15 minutos, hasta que al pincharlas con un cuchillo las notes blanditas pero no deshechas. Escurrir y reservar.
Se pone 1 cucharada de aceite de oliva en una sartén grande, a fuego alto. Cuando esté caliente, se vuelcan las patatas hervidas. Saltearlas hasta que estén doradas. Puedes añadir un poco más de aceite si fuera necesario.
Cuando estén bien doraditas añadir las especias. Remover con frecuencia para que no se quemen y que a la vez vayan cubriendo las patatas.
En una salsera poner la nata agria y encima la salsa dulce de chile. Yo con las prisas y como no tenía pensado publicarla lo que hice fue volcar el dip por encima de las patatas.