Disuelve la Maizena en la leche fría. Pon en un cazo la nata y el azúcar, mezcla bien y mueve de vez en cuando hasta que hierva.
Cuando la nata rompa a hervir, añade la maicena disuelta y unifica con unas varillas hasta que espese y deja cocer un par de minutos a fuego bajo. Añade ahora el ron y la canela y deja cocer un par de minutos más. Retira del fuego y sirve caliente que esa es la gracia !!!
No se te ocurra si se te ha enfriado o tan solo templado esta salsa, ponerla de nuevo al fuego para que coja calor por que irremediablemente, perderá su textura y se volverá semi líquida.
Lo mejor para mantenerla caliente, es que la tengas el baño maría aunque no hay nada como servirla en el acto ya que no necesita elaboración previa, se hace casi sola .