La pulpa de guanábana no muy madura se despepa cuidadosamente y se cocina en agua. Se escurre posteriormente en un balay sin exprimirla y luego se vuelve a cocinar con azúcar revolviendo constantemente. El punto se prueba dejando caer gotas en una vasija con agua: si se forman bolas de dulce, se ha llegado al espesor correcto. Se baten a punto de nieve las claras y se agregan a la paila del dulce revolviendo vigorosamente hasta que la mezcla blanquee. Se puede almacenar en gavetas de madera de una libra y se conserva como el arequipe.
Comentarios de los miembros:
Pesima receta pues no dan ninguna medida de los ingredientes,,,conclusion una perdida de tiempo