Debemos tener el horno caliente, vamos a gratinar a 230º más o menos. Batimos los huevos y salpimentamos.
En la sartén con aceite de oliva ponemos el ajito hasta que empiece a bailar, añadimos los champis y esperamos a que pierdan el líquido, esto es lo más lento. Luego añadimos las gambas, la cebolla, un poco de perejil y una pizca de sal.
Cuando casi han cambiado de color las gambas añadimos los huevos por encima de todo y esperamos hasta que esté casi cuajada. Entonces comprobamos la buena colocación de los elementos, ponemos los tomatitos bien colocados, un poco más de perejil y metemos la sartén en el horno(tiene que ser apta para el horno).
Estuvo durante 4 minutos. Como veis los bordes dorados y el centro no estaba seco sino aún jugoso. Un poco más de perejil. Ahora te toca probarlo a ti, nosotros ya lo hicimos.
Aquí no se tira nada: reutiliza el aceite de los tomates secos en conserva
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