En primer lugar, con la Thermomix, o una trituradora, machaca los kikos, hasta que queden de la textura de la foto, o incluso más deshechos.
A continuación corta el solomillo de cerdo en rodajas de aproximadamente dos dedos de grosor. Reboza las rodajas de solomillo por el siguiente orden: 1º harina, 2º huevo batido y finalmente por el polvo de kikos.
Frie las cortadas de solomillo en abundante aceite. Recuerda no pasarte en el tiempo, ya que de lo contrario te quedarán secos.
Para preparar la salsa, introduce el paté en una cazuela y calientalo, hasta que se vaya deshaciendo. A continuación, echa la nata liquida y ve incorporando ambos ingredientes con ayuda de unas barillas, hasta que estén totalmente integrados.
Si ves que te quedan grumos, puedes utilizar la batidora, para que quede una salsa fina, pero ten cuidado de no quemarte.
Finalmente sirve dos filetes de solomillo acompañado con un toque de salsa. Acompañar también con unas patatitas al horno (próximamente os dejaré la receta).