Delicioso cheesecake de queso ricotta con galletas de canela, una mezcla infalible. Hoy te enseñamos a hacer esta tarta de queso, un postre que nos tiene enamorados y a pocos disgusta. Para la base hemos elegido speculoos desmenuzados ligados con mantequilla, pero vosotros podéis usar el tipo de galleta que más os guste. Sobre ella, una cremosa capa de queso ricotta aromatizada con vainilla y para rematar la vamos a decorar con caramelo líquido y cacahuetes. Un pastel delicioso, de sabor delicado y textura perfecta. Si tú también eres un loco de este tipo de dulces no dudes en seguir el paso a paso de la receta que te explicamos con todo detalle justo aquí ↓
Molde con bisagras de 18 cm de diámetro (altura 9 cm)
Preparación
Precalentar el horno con ventilador a 210°C. Poner las galletas de canela (speculoos) en una picadora y triturarlos hasta desmenuzarlas. Añadir la mantequilla pomada y volver a mezclar hasta hacer una pasta.
Oner papel sulfurizado en la base de nuestro molde y engrasar los laterales con mantequilla. Cubrir el fondo con la mezcla de galletas. Presionar bien con ayuda de una cuchara subiendo la base un poco por los bordes.
Hornear durante 10 minutos a 210°C. Sacar del horno y dejar enfriar por completo.
Preparar la crema: batir el queso ricotta con los huevos y luego añadir: el azúcar + la esencia de vainilla + la harina y mezclar bien.
Bajamos la temperatura del horno a 150°C. Verter la preparación anterior sobre la base de galletas.
Hornear durante 45 minutos a 150°C. Comprueba la cocción y hornea un poco más si lo consideras necesario. Dejar enfriar completamente antes de desmoldar y decorar.
Desmoldar delicadamente. Para la decoración: verter caramelo líquido por encima, espolvorear speculoos triturados por toda la superficie y colocar algunos cacahuetes para decorar y aportar textura. ¡Y listo!