Descongelamos los langostinos y los lavamos. Pela y pica los dientes de ajo y ponlos en un bol. Pica también la guindilla y un manojo de perejil (necesitamos una cucharada de perejil) y agrégalos. Añade el zumo de limón, el whisky y 60 ml de aceite y mezcla bien. Otra opción es añadir el zumo a los langostinos cuando los saquemos del horno. Pela los langostinos dejándoles la cabeza y la punta de la cola sin pelar. Les quitamos el intestino. Colócalos en una bandeja de horno, sazona y aderézalos con la mezcla de aceite, whisky, ajo, guindilla y perejil.
Precalentamos el horno a 220grados. Ponemos en la bandeja del horno los langostinos en fila. Horneamos los langostinos a 220 grados durante 8 minutos. Calor arriba y abajo y media altura en el horno. O bien a 180 o 200 grados unos 12 a 15 minutos, dependiendo del horno. Servir inmediatamente.