Para comenzar hacemos la masa: Mezclamos la levadura y la leche y dejaremos reposar 10 minutos hasta que haga burbujitas. Mezclamos el resto de los ingredientes secos y le añadimos los líquido. Trabajamos la masa a mano 10 minutos hasta que quede elástica. Si usamos la máquina utilizaremos el gancho y amasaremos 7 u 8 minutos.
Dejamos la masa en un lugar cálido bien tapada por un par de horas.
Mientras tanto preparamos el relleno: Picamos el ajo con el perejil y el queso. Añadimos la mantequilla en pomada y el aceite.
Cuando la masa haya duplicado su volumen la dividimos en 4. Estiramos cada parte y extendemos una cuarta parte del relleno. Hacemos lo mismo con las otras tres partes.
Enrollamos cada parte y cortamos los extremos que usaremos para decorar la parte central del pan. Dividimos el resto de cada rollo en cortes triangulares.
En un molde redondo que previamente habremos forrado con papel de horno vamos colocando las piezas de pan. Dejamos que vuelva a levar otro par de horas en un lugar cálido.
Finalmente pintamos con la yema de huevo mezclada con una gotas de agua fria que habíamos reservado. Horneamos con el horno precalentado con turbo a 180ºC unos 25 - 30 minutos.