Lo primero de todo, escurrir las alubias que tenemos en remojo y ponerlas en una olla con agua fría.
Esperar a que hierva, añadir un chorro de agua fría para cortar el hervor y volver a esperar a que hierva.
Así tres veces. De esta manera sacamos los hidratos de carbono que provocan flatulencias.
Una vez que hemos hervido las alubias previamente, las colamos, enjuagamos y volvemos a meter dentro de la olla.
Añadimos trocitos de panceta de cerdo, la parte magra, y una ramita de tomillo. Cubrimos con agua y arrimamos la olla al fuego.
Cuando empiece a hervir, bajamos el fuego al 3 o cuatro y dejamos a fuego lento.
Mientras, hacemos un sofrito. Ponemos aceite en una sartén y añadimos la cebolla picada. Esperamos a que empiece a dorar e incorporamos la zanahoria. Pochamos a fuego lento.
Ahora añadimos el tomate triturado, subimos el fuego y dejamos que evapore el agua del tomate.
Ponemos dos cucharaditas de pimentón picante, un poco de comino y el choricito cortado en trozos. Reservamos.
Comentarios de los miembros:
Es un excelente platillo para el invierno,con un buen vino