Lo primero que vamos a hacer es poner el litro de agua fría en un cazo, ponemos los 10 g de Alga Kombu dentro y lo ponemos a fuego medio/bajo hasta que casi empiece a hervir. Retiramos el alga, echamos un pelín de agua fría (esto es para que deje de hervir el agua, si no lo ha hecho, lo obviamos), echamos los 30 g de Katsuobushi, lo dejamos justo hasta que el agua va a empezar a hervir, apagamos y dejamos reposar, hasta que veamos que el Katsuobushi se va al fondo.
Entonces, colamos con un paño fino o gasa y ya tenemos listo nuestro caldo dashi. Lo podemos guardar en el frigorífico unos dos días, o congelarlo, como podemos hacer con cualquier otro caldo, ya sea de carne o de pescado.
Con los restos de alga y de Katsuobushi, se puede hacer otra segunda cocción, que se llamaría Niban Dashi, que sirve también para hacer sopas de miso, por ejemplo, aunque como es lógico, ya no estaría tan pronunciado el sabor.
Espero que nos vayamos quitando el miedo a otras cocinas con ésta y otras recetas.