Lavar las berenjenas y cortar en lonchas de medio centímetro.
En un colador disponed las berenjenas con sal aproximadamente 7/8 horas.
Es importante, como se nota en la segunda foto, poner un peso encima para escurrir bien el agua de las berenjenas.
También es importante que os diga, que todo este proceso es útil a la hora de seguir la receta original, que contempla freír las berenjenas. En ese caso, las berenjenas bajo sal y agua, se tienen que poner 8 horas antes de cocinar, en caso contrario, la berenjena absorberá demasiado aceite estropeando el plato.
En caso seguid la receta asando las berenjenas, no hace falta todo el procedimiento anteriormente descrito.
Vamos a preparar la salsa de tomate sin grasas; en una cazuela ponemos el tomate pelado, troceado y sin semillas, albahaca, sal y pimienta.
Dejar cocinar unos 15 - 20 minutos y luego pasar por licuadora.
Lavar las berenjenas y freír con abundante aceite caliente.
En una fuente poner una cama de salsa de tomate y disponer una capa de berenjenas.
Añadir un poco de parmesano rallado, unos trocitos de mozzarella, albahaca y luego la salsa de tomate.
Poner otra capa de berenjenas y repetir la operación hasta terminar los ingredientes.
Recordar acabar la última capa con salsa de tomate, parmesano rallado, albahaca y mozzarella.
Hornear media hora a 180º. Sacar y comer. Es muy rica también fría.