En primer lugar, pondremos a hervir la pasta con abundante agua y sal. Lo dejaremos cocer el tiempo que diga el paquete de pasta para que esté cocida. Lo sacamos del fuego y escurrimos la pasta. Reservamos.
Mientras tanto, en una sartén pondremos unas 3 o 4 cucharaditas de aceite y cuando esté caliente rehogaremos la cebolla bien picadita. Cuando esté translúcida añadiremos los calabacines en dados, lo removeremos bien y dejaremos que se vayan cociendo. Para que el calabacín y la cebolla queden bien cocidos, le añadiremos un cacito de agua y dejaremos que se vaya evaporando.
Seguidamente, añadiremos el azafrán (si os gusta mucho una sobrecito, sino menos cantidad), la nata para cocinar y el queso. Al mismo tiempo, ajustaremos la sal, la pimienta y nuez moscada al gusto. Iremos removiendo bien para que quede homogénea la salsa. Dejaremos al fuego hasta la salsa haya reducido y una vez hecho la serviremos encima de la pasta que teníamos reservada.
Serviremos con un poco de azafrán por encima. Ya veréis que está deliciosa y os encantará.
Comentarios de los miembros:
Que buena tiene que estar,la probare
Me encantó.