Para preparar la masa se mezclan los ingredientes, se amasan y se deja levar 1 hora y 1/2.
Mientras preparamos la salsa de tomate poniendo un poco de aceite en una sartén. Cuendo esté caliente, echamos la passata de tomate, con un poco de sal, un poco de azúcar y orégano.
Dejamos que se fría y espese un poco, a baja temperatura. Reservamos. Mientras sube la masa, calentar el horno al máximo que de.
Una vez pasada la hora y media, dividimos la masa en tres trozos, pasamos al congelador los dos trozos que no vayamos a usar, y extendemos el otro con las manos o con un rodillo.
Si se va a hornear en piedra, hay que tener en cuenta que la base tendrá que estar bien enharinada para que no se pegue a la pala en el momento de ponerla en el horno. Os recomiendo leer mis consejos sobre cómo usar correctamente la piedra para hornear.
Ponemos por encima de la masa la salsa de tomate, la mozzarella, los daditos de calabaza previamente rehogados y la berenjena.
Una vez que el horno haya alcanzado la temperatura adecuada, pasamos la pizza a la pala y de la pala a la piedra. Esto parece sencillo, pero tiene su arte, hay que hacerlo con decisión, con un golpe de muñeca y sin titubeos. En 4 minutos la pizza estaré hecha, y queda crujiente pero elástica, ese es el secreto de la piedra de hornear.
Comentarios de los miembros:
Me gusto .-
Que piedra soy chilena