No es necesario que preparéis un cocido para hacer este puré, como decir en la entrada lo he elaborado con lo que me había sobrado de días anteriores. Eso sí, cuando guardé las sobras en la nevera hacer con un poco de caldo para poder hacer el puré.
Calentamos los garbanzos junto con su caldo, los ponemos en el vaso de la batidora y vamos batiendo y añadiendo caldo hasta que consigamos la consistencia deseada.
Por otro lado cortamos unos trocitos de pan, mejor si es del día anterior o en su defecto podemos utilizar pan de molde (mejor la corteza) y los freímos en aceite caliente. Cuando estén dorados los sacamos a un papel absorbente para quietar el exceso de grasa. Presentamos el puré junto con unos currusquinos de pan y listo para comer.