Comenzaba a oscurecer, mientras tomaba unos mates y disfrutaba de la tranquilidad del ambiente -Ya es hora de preparar la cena! Pensé. En la heladera hay carne y algunas verduras.
Sin dejar pasar más tiempo encendí el horno dejándolo en máximo. Mientras tomaba temperatura retiré la grasa de la superficie de la carne, rocié algo de oliva en una placa y sobre la Tapa de Asado*, la que acomodé para sellarla en el horno.
Lavé las verduras y las corte rústicamente. Puse cebolla blanca y de verdeo, puerros, zanahorias y tomates. Añadí un popurrí de hierbas frescas y salpimenté, le agregué un toque de salsa de hongos y otro de salsa de soja.
Retiré la carne ya dorada del horno, coloqué estas verduras ya condimentadas y apoyé la carne sobre esta cama de vegetales. Sazoné la carne, cosa que aún no había hecho.
Coloqué nuevamente en el horno por aproximadamente 20 minutos más, ahora en temperatura más baja.