Cocinamos la mitad de las peras en una cacerola sin agua, con la rama de canela, a fuego lento, hasta obtener una especie de compota.
Si Sueltan mucha agua, iremos retirándosela. Con diez minutos bastará. No se le añade azúcar todavía.
Mientras tanto trituramos el resto de la pera troceada, le añadimos el resto de los ingredientes menos el azúcar moreno, y batimos hasta que todo esté perfectamente integrado y tengamos una masa líquida pero espesa.
Supongo que dependerá de lo jugosas que sean las peras hará falta más o menos harina: La textura de esta mezcla ha de ser suficientemente consistente para que al verterle la compota por encima, ésta no se hunda.
Echamos esta masa en un molde engrasado y por encima repartimos la compota de pera.
Esparcimos por encima dos o tres cucharadas de azúcar moreno y horneamos 45 minutos a 160 grados.
Comprobar que está cocido con el método del palillo o aguja de tejer, pero teniendo en cuenta que la parte superior del pastel siempre pringará.
Tengo unas peras que me regalaron y no estan muy apetecibles. Voy a utilizar tu receta para aprovecharlas, la crisis, ya sabes, yo ya no tiro naaaaaada. Muchas gracias por compartir
Comentarios de los miembros:
He seguido todos los pasos y ha salido increíble.
Tengo unas peras que me regalaron y no estan muy apetecibles. Voy a utilizar tu receta para aprovecharlas, la crisis, ya sabes, yo ya no tiro naaaaaada. Muchas gracias por compartir
Delicioso, lo hice con las peras q tenía más maduras y...una gran solución
Demasiadas calorías