Mezclamos bien todos los ingredientes en un bol y batimos para que nos quede una crema ligera sin grumitos. Con la themomix, lo haremos en velocidad 4 durante 1 minuto. Vertemos la crema en un recipiente (o mejor en cubiteras) y al congelador.
Cuando esté totalmente congelado, desmoldamos los cubitos y los ponemos en el vaso de la thermomix.
Trituramos a velocidad máxima unos segundos para que adquiera cremosidad y se rompan los "cristales" que se habrán formado. Volvemos a introducir en el congelador.